Golden State, apoyado en Stephen Curry, Kevin Durant y su sólida defensa, ganó el domingo en el Oracle Arena por 126-85 para tomar ventaja de 2-1 en la eliminatoria al mejor de siete partidos.
Los Rockets, el equipo más ganador de la temporada, fue incapaz de reaccionar en el tercer compromiso ante los monarcas exponentes de la NBA e incluso los tres días de descanso parecieron haber ido más en contra que a favor del equipo.
Curry lideró a los Warriors al anotar 35 puntos, 18 en el tercer y decisivo cuarto del encuentro, secundado por Durant, autor de 25 unidades, Klay Thompson (13) y Quinn Cook (11).
Por Houston, James Harden encestó 20 cartones y dio nueve asistencias, mientras Chris Paul logró 10 rebotes y Clint Capela anotaba 13 puntos.
Los Rockets necesitan reorganizarse y encontrar una manera de volver a ganar, tal y como hizo en el segundo cotejo de la eliminatoria. Si pierden este lunes estarían abajo por 1-3, una situación muy difícil de remontar.
En el tercer compromiso, la escuadra visitante se desarmó por completo y fue incapaz de hacer nada a nivel ofensivo para tratar de contrarrestar el juego de los Warriors, quienes mostraron al mundo porqué ha sido capaz de ganar dos títulos en los últimos tres años en la NBA.
Con esta victoria, los campeones defensores tienen la oportunidad de poner al rival contra las cuerdas con un 3-1 a su favor y llegar al quinto juego de visitante en Houston al frente del duelo.
El lunes, LeBron James anotó 44 puntos y estableció récord de encestes en playoffs, para guiar el triunfo 111-102 de los Cavaliers de Cleveland sobre los Celtics de Boston en la final de la Conferencia Este e igualar a dos la serie.
James superó los dos mil 356 tiros de campo anotados por Kareem Abdul-Jabbar en postemporadas y además registró su sexto partido con más de 40 unidades.
