
A juicio de los querellantes, el actual sistema magnifica el impacto de algunos votos y hace caso omiso de otros.
En 48 de los 50 estados del país y el Distrito de Columbia (capital), el candidato presidencial que obtiene la mayoría de los votos se adjudica todos sus electores, recordaron reportes de prensa.
Por su parte, en Nebraska y Maine la distribución se hace de manera proporcional, de acuerdo con los sufragios obtenidos por cada contendiente.
Queremos igualdad, que los votos del colegio electoral sean similares al sufragio popular; en la Constitución establece que una persona es igual a un voto, sostuvo Luis Roberto Vera, abogado de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos, parte de los demandantes.
La candidata demócrata Hillary Clinton logró en las elecciones presidenciales de 2016 casi tres millones de papeletas más que el mandatario Donald Trump, quien se hizo con 304 votos electorales por 227 de su vencida oponente.
Aunque las demandas se presentaron en cuatro estados, el objetivo de sus promotores es modificar a nivel nacional el sistema electoral, que, en su opinión, viola los derechos constitucionales de asociación libre, expresión política y protección igual ante la ley.
Dichos recursos, expusieron las informaciones, no cuestionan la variante del colegio electoral establecido por la Constitución, sino el método de ‘el ganador se lleva todo’.