Por Prensa Latina
Ciudad de Panamá, PANAMÁ.- Las tensiones entre Panamá y Estados Unidos elevaron hoy su nivel tras el anuncio del Departamento de Estado de que los barcos norteamericanos están exentos de pago por el tránsito por el Canal.
En conferencia de prensa habitual de cada semana, el presidente del país istmeño, José Raúl Mulino, indicó que ese informe es una falsedad absoluta, mientras desde Dominicana, el secretario de Estado Marco Rubio, que acaba de visitar Panamá, comentó que le parecía un absurdo que Estados Unidos deba pagar tarifas «para transitar una zona» que está obligada «a proteger en tiempo de conflicto» .
Para Mulino, la información sobre la gratuidad de los impuestos está basada en «mentiras» y en «una falsedad absoluta» y dijo que es intolerable, al tiempo que confirmó después que mañana viernes a las 15:30 hora local hablaría con el presidente estadounidense, Donald Trump, quien insiste en retomar el control de la ruta fluvial bajo la supuesta influencia de China.
Mulino además señaló que no se debe seguir explorando las relaciones bilaterales entre ambos países “en base a mentiras y falsedades”.
En ese sentido, reafirmó que dio instrucciones a su representante en Washington, José Miguel Alemán, de tomar acciones respecto a las mentiras del Departamento de Estado, además de que compartieron a todas las sede diplomáticas el informe con el desmentido por parte de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP).
Para el excanciller Jorge Ritter, el gobierno de Panamá no puede acordar con el de Estados Unidos que no cobrará los peajes a sus buques de guerra.
Ritter dijo al canal de noticias TVN que las embarcaciones militares estadounidenses pagaron peaje cuando eran ellos los administradores y durante los 25 años de gestión panameña; y hacer lo contrario sería una violación flagrante de los Tratados de Neutralidad, suscritos en 1977.
La ruta fluvial de 80 kilómetros, inaugurada en 1914 y por donde pasa un seis por ciento del comercio marítimo mundial, fue construida por Estados Unidos y entregada a los panameños en diciembre de 1999 en virtud de los tratados Torrijos-Carter.
También el exadministrador de la Autoridad del Canal de Panamá consideró que se violarían esos acuerdos firmados en Washington, si Panamá exime del cobro a Estados Unidos porque sería discriminatorio para otros países.
Para Trump representa una amenaza a la seguridad nacional que el consorcio Hutchison, con base en Hong Kong, opere, bajo concesión, los puertos de Balboa y Cristóbal, en el ccruce desde los océanos Pacífico y Atlántico, respectivamente.
Mientras Mulino reiteró este jueves a la prensa que espera los resultados de una auditoría integral que realiza la Contraloría a esa compañía para tomar una decisión sobre la concesión de 25 años, establecida en 1997 y renovada en 2021.
«Si violan los términos de la concesión o le causan un perjuicio inminente en materia económica al país, actuaremos en concordancia, pero por lo pronto está la auditoría en pie», comentó el gobernante.
Mulino anunció hace una semana la cancelación del acuerdo económico de la Franja y la Ruta de la Seda, suscrito en 2017, y a la que pertenecen unos 150 países, lo que lamentaron las autoridades del gigante asiático.
En la jornada, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Guo JiaKun señaló que Beijing respeta plenamente a la autoridad panameña sobre la infraestructura.
Además, enfatizó el reconocimiento de la posición del Canal como una vía internacional de neutralidad permanente.