Los científicos evitaban en el pasado vincular eventos climáticos individuales con el calentamiento global, aludiendo a la dificultad de separar la influencia humana de la variabilidad natural del clima.
Diffenbaugh explicó que el nuevo documento es el más reciente en un campo en auge de la ciencia del clima llamado ‘atribución de eventos extremos’, que combina análisis estadísticos de observaciones climáticas con modelos informáticos cada vez más poderosos.
Los científicos encontraron que el calentamiento global de las emisiones humanas de gases de efecto invernadero aumentó las probabilidades de los acontecimientos más calurosos en más del 80 por ciento de la superficie del planeta, para los cuales había observaciones disponibles.
Nuestros resultados sugieren que el mundo no está exactamente en el punto en el que cada evento caliente tiene una huella humana detectable, pero estamos acercándonos, alertó Diffenbaugh.